La respiración es la herramienta esencial para la vida humana. Una correcta respiración es la base para:
· fomentar la salud y la vitalidad
· controlar los estados de ánimo
· desarrollar la concentración
· promover nuestra conexión espiritual.
El cuerpo es el receptáculo viviente para la respiración. Nuestra musculatura abre espacios en nuestro interior permitiendo el ingreso de aire nuevo incorporando nutrientes y luego se cierra para empujar el viejo aire hacia fuera eliminando las toxinas de nuestro organismo. Esta expansión y contracción masajea nuestros órganos internos, favoreciendo la digestión y promoviendo la circulación de la sangre.
Existen diversas técnicas al alcance de todos, que permitirán desarrollar y experimentar el potencial de nuestra respiración. Aquí les ofrecemos algunas pautas para practicar una respiración correcta:
La postura debe ser cómoda, sentado sobre el piso o en una silla, con la columna recta, los hombros relajados y los ojos cerrados. La respiración natural se hace por nariz, ya que esta filtra y calienta el aire que ingresa a nuestro organismo. Al inhalar el ombligo se expande hacia fuera, y al exhalar el ombligo va hacia adentro y arriba, intentado que la exhalación sea completa vaciando los pulmones. Es importante tener conciencia del aire que ingresa y sale de nuestro cuerpo, haciendo que nuestra mente siga a nuestra respiración.
La experiencia de la respiración correcta creará un impacto a nivel físico, emocional, vital y espiritual, permitiendo desarrollar el potencial creativo de nuestras vidas.