¿Cúales son los fundamentos de nuestra respiración?
Nuestra respiración normal, aquella que hacemos sin poner ningún control,está basada en nuestros hábitos: nuestras posturas físicas,nuestros estados mentales, nuestras respuestas emocionales a los desafios de la vida cotidiana.
Estos hábitos se pueden entrenar a través de una práctica conciente de la respriación. Aumentar el rango de nuestra respiración normal permitirá mejorar la vitalidad física y mental, además de prepararnos emocionalmente para enfrentarnos a situaciones críticas.
¿Por donde comenzar?
Partimos siempre de la observación. Esta toma de conciencia nos permitirá reconocernos. Es muy importante que la observación sea sin juicio. La neutralidad también es un hábito que podemos desarrollar, y nos permitirá reconocer nuestro potencial.
Al observar nuestra respiración normal vamos a prestar atención a algunos puntos importantes:
- el sonido de tu respiración. Prestá atención al tono, el ritmo, la velocidad, la intensidad e incluso la tensión: ¿es relajada o forzada?
- Visualizá el aire entrando a tu cuerpo: como se llenan los pulmones, como se vacian.
- Visualizá el diafragma en su movimiento: hacia abajo en la inhalación, hacia arriba en la exhalación.
- Sentí la respiración a través de la expansión y contracción de las costillas y la caja torácica.
- Sentí la respiración como entra por las fosas nasales, recorre la garganta, entra en los pulmones, y hace su recorrido inverso.
- Sentí la temperatura de la nariz, el aire fresco que entra, el aire cálido que sale del cuerpo.
Recomendaciones generales para la práctica de Pranayamas
- Practicar con el estomoga vacío, pero no teniendo hambre porque esto distrae la mente.
- Mantener una postura correcta: espalda recta, mentón paralelo al suelo y suavemente hacia adentro. Mantener el pecho abierto.
- Seguir las instrucciones y no improvisar.
- Estar lo más relajado que puedas, soltando las tensiones innecesarias.
- Mantener la atención en el sonido y en el flujo de la respiración.
- La postura y la práctica debe ser confortable, sin esfuerzo y sin generar daño.
David Scarso, Instructor de Kundalini Yoga